Sunsets de película, el glow de la golden hour, ese efecto sunkissed en tu piel... Todo brilla en verano, ¡menos tu melena! Sí, has leído bien: mientras que tú sueñas con que tu estación favorita del año no se acabe nunca, tu pelo está pidiendo a gritos unas vacaciones del sol, el cloro y la sal.
Te ponemos en contexto: la fibra capilar está compuesta por queratina, aminoácidos, melanina, proteínas y lípidos; y las radiaciones ultravioleta, la sal del agua y el cloro de tu piscina, además de resecar tu cabello, ¡pueden alterar y dañar de forma heavy su estructura química!
¿Qué efecto tienen las radiaciones solares en el pelo?
El sol es uno de los peores enemigos de tu cabello, y es que, mientras que radiaciones UVB dañan la cutícula consiguiendo que tu melena pierda el brillo y se encrespe en exceso, las radiaciones UVA afectan al interior de la fibra capilar, provocando una pérdida de proteínas, aminoácidos, y melanina. ¿El resultado? El cabello se ve dañado, sin vida, fosco, frizzy y con las puntas abiertas.
Además, la pérdida de melanina es la responsable de que tu pelo se aclare en verano (sobre todo en las puntas que es la zona más dañada) y se vea con ese tonito rubito californiano que tanto nos gusta, pero debes saber que no es ni más ni menos que una oxidación del color y daño solar.
¿Cómo afecta la sal y el cloro en el pelo?
Si te preguntas cómo afectan la sal y el cloro a tu pelo, debes saber que casi todo es culpa del pH del agua (bueno, el cloro y las sales también tienen muchísima culpa), ya que en ambos casos el pH es alcalino, y eso destruye los lípidos de tu cabello, haciendo que se vuelva quebradizo, rígido, y que esté súper seco y encrespado. Además, la presencia de algunos elementos químicos en el agua del mar o de la piscina también oxida el color de los cabellos teñidos o con mechas, haciendo que cojan esos tonos amarillos (en el caso de las blondie), o anaranjados (si eres team brunette) que nos llevan de cabeza.
¿Cómo proteger tu pelo en verano?
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Proteger tu melena del sol a 40ºC parece imposible, ¡pero es súper sencillo! Tan solo tienes que aplicar tu producto favorito con aceite de coco antes y durante la exposición solar, recogiéndotelo en un low bun y usando gorra, o sombrero, para proteger tu melena lo máximo posible.
Nuestro producto must-have es South Bondi, un acondicionador leave-in formulado con este aceite tan guay, además de extracto de melón y de papaya que son súper antioxidantes, y defienden al cabello de los radicales libres y del fotoenvejecimiento. Y sí, el pelo también envejece y va perdiendo su fuerza, además de ralentizar su crecimiento, y nosotras que queremos un pelazo largo y sano a lo Brooke Shields en Blue Lagoon, no podemos permitirnos eso.
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Si lo que te preocupa es el agua salada o el cloro de tu piscina, tranquila, ¡también puedes salvar a tu cabello! Te recomendamos aplicar Cotton Lust de medios a puntas para que los aceites de este sérum tan delish rellenen los huequitos de la cutícula, evitando que la fibra se dañe. ¡Y el olor es totalmente irresistible!
También es una buenísima opción utilizar una vez a la semana un champú detox, como Bare Wash, enriquecido con ingredientes activos quelantes de metales, para conseguir una limpieza súper eficaz, protegiendo tu cabello de la acumulación de sales, cloro, cobre y otros metales y minerales que lo dejan fosco y sin ese efecto glossy que amamos.
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Last but not least, L’Essentiel Mask va a ser tu crush absoluto post planes de playa o piscina, y es que es una mascarilla de lo más nutritiva compuesta por aceites súper emolientes como los de coco, aguacate y mango, y extracto de açai cargadito de ácidos grasos. Va a nutrir el cabello en profundidad, además de reconstruir la fibra capilar gracias a la presencia de proteínas hidrolizadas de trigo, devolviéndole a tu melena la fuerza, la resistencia, y el brillo que mereces.
¿Verano y pelazo? OH SÍ!!!!
